Después de la reforma tributaria 1819 de 2016, ley de financiamiento del 2018, y la normativa exigida por la UGPP, se puede evidenciar un impacto negativo para el inversionista que busca posibilidades de generar rendimientos en el país, una de las razones mas significativas recae en que, después de que las empresas pagan un impuesto de renta del 33% sobre sus utilidades, los socios la que se reparten estas mismas, deben asumir un impuesto aproximado al 15%, generando esto un pago de impuestos al estado del 48%, adicionalmente la UGPP, exige otros pagos de prestaciones, dentro del cual destaca el de salud equivalente al 12.5%, que si se suma al otro 48%, nos daría un total en pago de impuestos y prestacionales equivalente al 60.5%, lo cual muestra una carga excesiva en impuestos y demás obligaciones, conllevando a una desinteresada posibilidad de que mas inversionistas ingresan al país o los que existen actualmente quieran reinvertir sus recursos en Colombia.